¿POR QUÉ NO PUEDO COMER ALIMENTOS FRÍOS?

Muchas personas nos llaman en esta época estival del año, para consultarnos el motivo por el que no pueden beber o comer nada especialmente frío ni dulce. Es importante saber que esto puede ser por varios factores. Tus dientes se vuelven sensibles al frío y al calor cuando la parte blanda de dentro del diente llamada «dentina» queda expuesta. Esto puede ocurrir si tienes una enfermedad en las encías, ya que esta puede derivar en recesión de las encías, o si el esmalte se desgasta. También este malestar dental a la hora de injerir alimentos fríos puede deberse a otras factores como una caries, un diente agrietado o astillado, un empaste desgastado.
¿CEPILLO DENTAL ELÉCTRICO O MANUAL?

El cepillo eléctrico reduce más la placa bacteriana, que es la responsable de la producción de caries y de gingivitis. Son más respetuosos con el esmalte. Estos aparatos tienen un mecanismo de control de la presión que evita que se produzca una abrasión en la superficie de los dientes, respetando así el esmalte dental.
Hay cepillos eléctricos de última generación que emiten una señal acústica o vibratoria que avisa de que han transcurrido los 2 minutos necesarios para un correcto cepillado. Estos aparatos están diseñados con un mecanismo de control de la presión para no erosionar la superficie de los dientes. Además, con el cepillo eléctrico se reduce la placa bacteriana encargada de producir las caries o la gingivitis.